Objetivo 2021-2022: creación de una línea de Doctorado en Trabajo Social Sanitario en Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC.
Este camino es largo. Pero… ¿de dónde venimos? En términos de tiempo, se produce el giro profesional en el año 2003, pero la primera evidencia del reconocimiento real del trabajo social sanitario como profesión sanitaria, posiblemente, se remonta a 2011. Posiblemente, porque desconozco si hay otra sentencia anterior en la misma línea. Sentencias jurídicas, no informes internos o borradores.
Digo 2011 porque me refiero a la sentencia 077/2011, dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, la cual marcó con claridad los pasos a dar para alcanzar el reconocimiento del trabajo social sanitario como profesión sanitaria.
La sentencia argumentaba: «…la parte actora, en apoyo de su pretensión, tal personal se hallaba englobado dentro del personal sanitario como –asistentes sociales de atención primaria– […] Pero la regulación posterior no deja duda alguna de su consideración como personal no sanitario, pues tales asistentes sociales (ahora denominados trabajadores sociales) no se hallan dentro de las profesiones sanitarias de nivel de licenciado ni de nivel diplomado» Estos eran los hechos, como diría Gordon Hamilton.
Pero Hamilton nos enseñó a poner el foco en los factores, los factores como «hacedores» decía ella. Así que en la misma sentencia, los factores venían alumbrados por la siguiente argumentación: «sin que a ello pueda meramente oponerse la posibilidad de hacer uso del apartado tercero del artículo 2 de la Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de reordenación de las Profesiones Sanitarias, pues ello requeriría que se dieran las circunstancias allí previstas, tanto por razón del contenido, de titulación y regulación, y previsión legal que aquí no concurren».
Se refería al momento dado entonces en 2011. Seguía, no obstante, diciendo: «En este sentido, y como ya destaca la Administración demandada, la propia Exposición de Motivos de la Ley anteriormente citada, ya subraya que –en esta Ley se reconocen como profesiones sanitarias aquellas que la normativa universitaria reconoce como titulaciones del ámbito de la salud, y que en la actualidad gozan de una organización colegial reconocida por los poderes públicos–».
Una vez el Máster Universitario de Trabajo Social Sanitario resultó ser un hecho, un objetivo logrado, nuevos hechos ponían de relieve la necesidad de contar con una estructura jurídico y legal que permitiera poner en valor el mencionado programa universitario en Estudios de Ciencias de la Salud y en base a la sentencia citada, diseñar una estrategia para alcanzar el reconocimiento profesional de «profesión sanitaria». Así se creó la Sociedad Científica Española de Trabajo Social Sanitario (SCETSS) y desde el principio vimos que había que lograr el cambio desde dentro de las instituciones, básicamente el Ministerio de Sanidad y el Congreso de los Diputados. Desde enero de 2019 con vaivenes, estamos pendientes del reconocimiento, pero por diferentes fuentes, podemos estimar que es cuestión de poco tiempo que llegue.
Desde la SCETSS y el MUTSS-UOC sentimos en primera persona la responsabilidad de lo que supone liderar este movimiento universitario de transformación del trabajo social sanitario desde la disciplina, para equipararlo a las otras profesiones sanitarias. Por ello, una línea de Doctorado en donde el trabajo social sanitario sea el hilo conductor de la investigación es el siguiente gran reto como formación posterior al Máster.
Desde el año 2008, los Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC apoyan el trabajo social sanitario desde la academia. Con ello contribuyen directamente de la generación de conocimiento y desarrollo de la profesión, a la creación de puestos de trabajo. Por ejemplo, según fuentes del Ministerio de Sanidad, desde 2010 hasta 2018 las plantillas de los hospitales de España se han incrementado en un 15%.
El Doctorado de Trabajo Social Sanitario contribuirá de manera activa a este objetivo de generar conocimiento desde la profesión para la profesión y para el sistema sanitario en general.
Dolors Colom Masfret (Vocal SCETSS) – Barcelona, 27 de noviembre de 2020
Buenas noches Sra. Colom, el doctorado es muy buena idea para alzar el trabajo social sanitario. En algún momento me gustaría hacer el master. A día de hoy estoy haciendo un curso de Trabajo Social Sanitario. Tiene 100 hrs, pero es muy interesante.
Por otro lado, quisiera preguntarle si es bueno hacer un master de Trabajo Social Sanitario a nivel internacional o si sabe ud de algún organísmo a nivel interancional (tipo ONU, UNICEF, ETC) donde se trabaje el Trabajo Social Sanitario ya que tengo la sensación que nuestro papel en la sanidad en cualquier parte del mundo es muy importante.
Por otro lado, le comento si es recomendable saber la terminología de nuestra profesión en otro idioma o si en algún otro país existe la figura del Trabajador Social Sanitario.
Muchas gracias.
Buenos días Sr. Panedas, gracias por su mensaje. Los estudios trabajo social sanitario implican adquirir nuevos conocimientos que no se imparten en los Grados. Esto es lo que permite crear una disciplina nueva. Le animo con el máster de trabajo social sanitario de la UOC. De hecho el modelo de la UOC es internacional y hemos tenido alumnado de diferentes países.
La profesión está extendida por todo el mundo, puede ver la literatura científica generada cada año. La denominación de trabajo social sanitario fue el resultado de un largo tiempo de reflexión personal primero y con otros profesionales después allá por los primeros del 2000. Era imprescindible que la denominación acotara los contenidos de la profesión y a fututo de la disciplina. En su momento y por otros motivos tangenciales pude consultar con elaboradores de diccionarios la pertenencia de la denominación y avalaron que fuera Trabajo Social Sanitario. Todas las auditorias que hemos tenido han subrayado la claridad y pertenencia de la denominación a los efectos profesionales.
Cuando se es el primero, como ha sido el caso del máster de trabajo social sanitario de la UOC, no siempre supone iniciar un camino plano y tranquilo de creación y desarrollo, pero iniciar un proyecto nuevo y darle forma y contenido, modelarlo, siempre es un camino apasionante, de momento este lo está siendo incluso diez años después de haberlo iniciado. .
Quedo a su disposición y aprovecho para felicitarle el Año Nuevo.